martes, 19 de mayo de 2015

no te sueltes de mi hombro


 

 

NO TE SUELTES DE MI HOMBRO.

Por

Hugo Rodríguez.

 

¡Ah, por fin pudimos dejar esa fiesta de morondanga! ¡Uy! ¡Cómo refrescó! Juan, abrazame. Sí Ceci. Vení, vamos por acá, mi amor. ¿Estás seguro que era por allí? Sí, por esa callecita dejé el auto. ¡Qué oscuro! Y la noche no ayuda en nada: sin luna, sin estrellas. ¿Dónde mierda lo dejé? Creo que más adelante, vamos. Ahora sí que está oscuro. No veo nada. Vos seguime. Al tanteo, pero lo voy a encontrar. Fito de mierda. ¿Tenés un fósforo, Ceci? ¿Y para qué iba a traer fósforos, Juan? Claro. Juan, no oigo nuestros pasos. Esto no está bien, volvamos. Seguimos un poco más, cualquier cosa regresamos. Mi amor ¿Estamos caminando? ¿Sí, Ceci? ¿Qué boludeces preguntás? No sé, me siento rara.  Chupaste de más. Andá a cagar. ¿Dónde dejé el Fito? ¡La puta madre! Volvamos, amor. Tomemos un colectivo. Mañana venimos por el auto. A esta hora no hay bondis. Ya lo voy a encontrar. Dejame que tantee un poco, no se ve una mierda. Yo me voy, esto no me gusta. Aguantá unos minutos, Ceci. No te sueltes de mi hombro. Si no te tomaba del hombro. ¿Y entonces quién? No sé, además, Juan, no veo mis manos, sé que las tengo, pero no sé dónde están. Cuidado, hay escalones, parece la entrada a un sótano ¿Dónde? Adelante, seguí detrás de mí. Creí que vos ibas detrás de mí. Cecilia, bajá con cuidado. Yo siento que camino por las nubes. No, son escalones, bajá despacio porque podés tropezar. ¿Y hacia dónde vamos, mi amor? ¡Juan, contestame! ¿Dónde estás? Acá, acá, Ceci, te dije que no me soltaras. Pero si no sé dónde estás, te sigo por la vos, no veo un carajo. Allá abajo hay más voces ¿las oís?  La verdad que no. ¡Eh! ¡Los de ahí abajo! ¿Nos escuchan? ¿Nos pueden decir dónde estamos? ¿A quién le gritás, Juan? Si no hay nadie. Como que no, estamos nosotras. ¡¿Eh?! ¿Y ustedes quiénes son? Juan, ¿las escuchaste? ¡Juan! Tranquila Cecilia, aquí estoy yo. ¿Quién? ¿Qué, ya te olvidaste de mí? ¿No me reconocés…? ¡Juan! ¡¿Dónde estás?! ¡Por favor, hablame! ¡Ceci, acá! ¡Por acá! ¡Está lleno de locos, Juan! ¡Seguí hablando Ceci, así te ubico! ¡Ceci! ¡Hablá! Tu noviecita ya no te oye. ¿Y vos quién sos? Mejor preguntame ¿Qué soy? ¡No le hagan nada a Ceci porque la ligan! ¿Dónde mierda estoy? Justamente, quizás estemos allí, en la mierda. Este es el Fin Último. Nadie nos viene a recibir, ni con los brazos abiertos, ni con un corazón enorme. Nadie. Solos, en esta eternidad nauseabunda, amontonados, sin asfixiarnos porque ya no precisamos respirar. Por qué mejor no te callás y me decís dónde está Ceci. Per me si va ne la città dolente, per me si va ne l'etterno dolore, Y ahora quién habla.  Lasciate ogne speranza, voi ch'intrate. ¡Uf! Das Ewig-Weibliche Zieht uns hinan.  Y ese ¿qué dijo? Ich weiß nicht wie du heisst, doch ich weiß dass es dich gibt. Ich weiß, dass irgendwann, irgendwer mich liebt.  En esto despertó el que en buen hora nació. Vido cercado el escaño de sos buenos varones: ¿Qués esto, mesnadas o qué queredes vos? ¿Y para qué iba a traer fósforos? Pero pebeta, esto es como una festichola pa’ siempre. Sí, una festichola de morondanga ¿Ceci, sos vos? ¡Uy! sí, va, creo que sí, y vos ¿sos? ... Juan, boluda. Hace un montón que te estoy buscando. Ah, sí, Juan, claro ¿Qué Juan? No te hagas la gila y vení para acá. Sliha, sliha, baruch HaShem. Ceci, Ceci, ya la perdí de nuevo. ¿A quién buscás? ¿Y ahora, quién habla? yo, yo ya no recuerdo mi nombre. Decime por lo menos que lugar es este,  por qué tanta oscuridad. ¿Oscuridad? si está lleno de luz. Hermosa luz. Uy, otra loca. Mishigas, mishigas.  En todo caso loco. Perdoná, no veo una mierda, viste. ¡De donde salió toda esta gente? ¿Y todos hablan, no se callan nunca? Moisheh kapoyer,  klip. No somos gentes, somos voces, pensamientos, poesía. Sí, sí, está bien, al menos decime por donde puedo salir. No, no hay salida. Este es El Lugar. Aquí llegamos y aquí nos quedamos. Sí, claro ¡tomátela! ¡Ceci! ¡Ceci!  ¡¿Dónde estás?! A woman is a dish for the gods, if the devil dress her not ¡Silencio! ¡¿Por qué no se callan?!  And nothing can we call our own but death.
  NosémesientoraraAquiénlegritásJuanSeguimosunpocomásbajádespacioporquepodéstropezarTomemos
uncolectivoPermesivanelacittàdolente¿YvosquiénsosEnestodespertóelqueenbuenhoranació¿Cecisosvos?Juan¿escuchaste?decimepordondepuedosalirSlihasliha¡¿Porquénosecallan?!permesivanel'etterno

 

Glosario.

Per me si va ne la città dolente, per me si va ne l’etterno dolore. Por mí se va a la ciudad del llanto; por mí se va al eterno dolor. Dante (Infierno).

 

Lasciate ogne speranza, voi ch’intrate. ¡Oh vosotros los que entráis, abandonad toda esperanza! Dante (Infierno).

 

Das Ewig-Weibliche Zieht uns hinan. Lo eterno femenino nos arrastra hacia lo alto. Goethe (Fausto).

 

Ich weiß nicht wie du heisst, doch ich weiß dass es dich gibt. Ich weiß, dass irgendwann, irgendwer mich liebt. Yo no sé cómo te llamas pero yo sé que existes Yo sé que algún día alguien me amará ().

 

Sliha. Disculpas (arameo)

 

Baruch HaShem. Bendito sea el nombre (arameo).

 

Mishigas. Locura (Yidis)

 

Klip.  Mujer parlanchina (Yidis).

 

Moisheh kapoyer. Persona que hace todo al revés (Yidis)

 

A woman is a dish for the gods, if the devil dress her not. Una mujer es plato de dioses si no la viste el diablo (Shakespeare).

 

And nothing can we call our own but death. Y nada puede ser llamado nuestro excepto la muerte. (Shakespeare).

 En esto despertó el que en buen hora nació,

Vido cercado el escaño de sos buenos varones:

¿Qués esto, mesnadas o qué queredes vos? Mío Cid.